La mayoría de los virus contemporáneos son dañinos, infectan archivos
mayormente de extensión EXE, COM, DLL, etc. los cuales a su vez se convierten
en portadores del código viral. Los archivos de otras extensiones pueden ser
infectados y afectados, pero no reproducen el virus, a excepción de los Macro
Virus que son archivos tipo documento y que fueran reportados por primera vez
en Julio de 1995.
Los otros objetivos comunes de los virus son las áreas vitales del sistema,
tales como: la memoria, el sector de arranque (boot sector), la Tabla de
Particiones o el sector absoluto del disco llamado Master Boot Record (MBR).
Dependiendo del tipo de virus, un software antivirus puede reparar y reconstruir
los archivos y áreas afectadas del sistema, sin embargo existen algunos
programadores de virus que deciden que los archivos afectados sean mutilados
de tal forma que ya no sea posible su reconstrucción.
A partir de 1999 se empezaron a propagar a través de mensajes de correo
electrónico, por Internet, virus anexados de diferentes técnicas de programación.
Hoy día los virus informáticos son desarrollados bajo una o más técnicas de
programación, y pueden ocasionar cualquier tipo de daño, sujeto al libre
albedrío de sus autores.